No te vayas

Me dirigí corriendo hasta la habitación de la última planta donde se encontraba mi hermano. Abrí la puerta con suavidad y la cerré tras de mí con el pie.
La maleta estaba encima de la cama, cerrada y preparada para volver con Alex a Inglaterra. Él, por su parte, estaba sentado en una de las cómodas sillas de la suite, con una copa en la mano. Parecía que estaba bebiendo.

-¿Qué haces? -Él se limito a mirarme con una expresión que no supe descifrar. Dejé caer el bolso al suelo y me acerqué más a él.

A medida que acortaba la distancia, las palabras de Kyle resonaban más fuerte en mi cabeza. Sentía que me estaba sonrojando cada vez más, pero me armé de valor y me senté en sus piernas de tal forma que quedé mirándole de frente. La falda del vestido se subió un poco dejando a la vista más de lo que desearía.
Con un movimiento rápido acerqué mi boca a su cuello y él me dejó hacer pensando que iba a morderle, pero me limité a rozarle con la lengua de arriba a abajo. Sentía la respiración y el ritmo cardíaco muy acelerados. Con las manos hice que inclinara levemente su cabeza para poder susurrar en su oído.

-No te vayas, por favor.

Con toda la delicadesa que pude la quite de encima de mi no hagas eso quieres la mire severamente no cambiare de opinion me largo de aqui no soporto estar aqui ya tan repleto de cazadores y con tanta luz odio este lugar regresare a Inglaterra pero no me quedare hay solo arreglare los papel para ocupar el puesto de primer ministro no evadire mis responsabilidades pero tan pronto arregle mis papeles me largo con mis tios Transilvania.

Pero no pienzo casarme contigo y seguir finguiendo que todo esta bien por desgracia naci en la rama de la familia principal de los sangre pura y odio esta vida me enamore de mi hermana y desde que naci me han obligado a vivir en protocolos y todas esas tonterias ya estoy arto tu eres la hija primogenita tu eres quien sera reina toda mi vida la dedique a ayudarte odiaba ver que no te dejaran ser tu misma con tantos protocolos y normas de estilo de vida y trataba de ocupar todas las responsabilidades que pudiera para que tu carga fuera mas pequeña pero ya no lo soporto ya no soporto llevar esa carga y encima de todo que siga igual .

Siempre sospeche lo tuyo con Kaname y nunca le informe a nuestro padre porque porque te veia feliz pero por dentro me volvia loco mis ojos empezaron a cambiar color azul a rojo y despues a un intenso negro esta empezando a perder el control de mi mismo no me cazare contigo ni pienzo tener un hijo contigo si solo lo haces por que el senado el consejo y todos lo quieren asi preferiri mil veces que nuestro linage desapareciera antes que tener un hijo contigo solo porque si siempre hice y deje de lado lo que sentia por ti pero esta vez no hermana .

No me lo podía creer. Esta era la segunda vez que me rechazaba.
Un dolor desconocido para mí surgió a la altura de mi pecho. Cada latido que daba mi corazón era un mal trago, como si la sangre se hubiera espesado en mis venas y fluyese con dificultad. Le di la espalda porque no podía seguir aguantando su mirada.
Mis pensamientos eran un caos. Había estado tan feliz con su proximidad que cuando me había apartado de él se había quebrado mi concentración. Sin poder contenerme por más tiempo le grité, aún de espaldas, todo lo que se me estaba pasando por la cabeza.

-Todo lo de que me quieres es mentira, ¿verdad? Siempre utilizas la misma excusa para escabullirte. Siempre me rechazas. ¿No ves lo mucho que me duele cuando lo haces?

Me abracé a mí misma intentando buscar el consuelo que mi hermano no quería darme. En ese momento realmente pensaba que otra vez estaba siendo engañada.

Que fue lo que dijiste en ese instante mi ira se fue como si nunca me hubieran molestado fui hacia ella y la abrace perdon no sabia que te sentias asi crei que no querias nada conmigo despues de todo lo que paso le levante la cara con mi mano derecha la mire unos momentos a los ojos si te amo harmana pero te preguntare tu me amas a mi me hacerque con mi rostro al suyo hasta estar a unos centimetros de su boca perdon por hacerte sentir tan mal despues de decir eso la bese era la primera vez que besaba a alguien pues siempre habia querido que mi primer beso fuera con ella me sentia tan feliz de sentir su boca acariciando la mia y no queri detenerme pero me separe de ella para ver si esta vez no la habia incomodado como las vez que la mordi.

Se separó de mí demasiado pronto. Sentía temblar todo mi cuerpo y apenas podía concentrarme, por lo que no sabía si me estaba hablando o no. Me había quedado con ganas de continuar besándole.
Me puse de puntillas y alcancé sus labios de nuevo.
Enrredé las manos en su pelo y le incliné más hacia mí para poder profundizar el beso. Una ola de calor se apoderó de mi cuerpo y le estreché contra mí. No sabía muy bien lo que estaba haciendo, pero notar su boca entrelazada con la mía despertaba un apetito que nunca antes había experimentado. Mis manos se aferraron a él y cuando ya no podía aguantar por más tiempo sin respirar paré. Inhalé aire, dándole tiempo a él también para recuperarse.
Iba a continuar cuando pensé que quizá esta vez sería como las anteriores y terminaría por pararme. Lentamente dejé caer las manos a los lados de mi cuerpo.

-No creo que pueda seguir controlando esto. De momento estas a tiempo de pararlo.

Pararte sabes esperaba que tu fueras quien me parara hermanita me acerque y comense a besarla apcionadamente despues fui bajando hasta llegar a su cuello al llegar hay comense a lamer en circulos la cicatriz que tenia de mi mordida y despues la mordi con cuidado de no lastimarla y empece a beber su sagre cuando por fin sacie mi sed me dirigi otra vez a su boca con mi lengua delinie el contorno de sus labios y con mi boca aun manchada con su sangre la volvi a besar no queria parar pues no sabia si esta seria mi unica oportunidad de sentir el afecto de mi hermana .

Sabes siempre soñe con este momento y aora que lo estoy viviendo no puedo creer que sea una realidad Lily le quite un mecho cabello que le tapaba el rostro lleve mi mano derecha a la cicatriz que tenia de la mordida de mi hermana en el cuello clave mis dedos indice y medio en la cicatrizque tenia de ella en mi cuello hasta que de ella empezo a salir sangre mi sangre es toda tuya hermana.

Me acerqué a su cuello y el olor de su sangre embotó mis sentidos. Bebí de él con ansia y el se inclinó para facilitarme las cosas. Apenas pude beber, pues estaba completamente saciada de la noche anterior.

-Ayúdame con esto.

Coloqué sus manos en mi cintura y le di a entender que me aupara. Él me alzó del suelo, sin saber cuales eran mis intenciones, pero yo enrosqué mis piernas en torno a su cadera fuertemente y le agarré del cuello de la camisa mientras le acercaba de nuevo a mis labios. Le besé varias veces antes de dejarme caer sobre sus hombros. Sentía mi piel arder.

Por lo visto mi hermana tenia planeado ir mas lejos de lo que yo pensaba pero francamente eso me tenia sin cuidado.

Camine hastala cama y la deje caer en ella dspues me sente a un lado de ella la mire unos mometos podia sentir como se aceleraban mis latidos y el calor que emanaba mi piel me puse encima de ella y comense a besarla en el cuello despues con mi lengua delini una linea hasta llegar desu cuello a su boca comense a besarla mientras con mis manos mi iva quitandome el saco y la capa que estaba comensando a estorbarme.

Sentía miles de mariposas en el estómago, que revoloteaban cada vez más fuerte a medida que mi hermano me tocaba. Se estaba quitando la ropa y yo cada vez tenía más calor. Le empujé hacia un lado de la cama para apartarle de mí y poder ponerme yo encima. Pasé mis piernas a ambos lados de su cintura y me acomodé sobre él. Con deliberada lentitud me quité el vestido sacándolo por la cabeza y lo arrojé lejos.

-Estoy ardiendo, hermanito.

Coloque sus manos sobre mi piel para que lo pudiera apreciar mejor y me incliné hacia su pecho. Mi lengua recorrió el camino hasta su ombligo mientras gemía deleitándome con su cuerpo. Me estiré sobre él y le miré a los ojos, totalmente colorada, mientras sentía su piel desnuda contra la mía.

Jaja no es justo solo tu te llevas la mejor parte hermanita me levante de golpe haciendo que ella cayera en la cama es tu turno hermanita empece a subir lentamente mi mano desde su rodilla hasta llegar a su estomago al llegar hay me detube luego la lleve a su cintura y la jale contra mi sabes hermanita ya me encendiste tu tambien a mi lleve mi mano por detras de su espalda hasta llegar a su sujetador y con un ligero movimiento de mi mano selo quite vaya tu cuerpo esta ardiendo verdad .

-S-sí -Murmuré-. Es que estoy muy caliente.

Me reí interiormente ante el doble sentido de las palabras. Deslicé mis manos por mis caderas hasta llegar por debajo de lo que me quedaba de ropa interior. La bajé por mis piernas hasta que cayó al suelo junto con todo lo demás. Después me tapé el pecho mientras respiraba agitadamente. Mis brazos subían y bajaban, y parecía que mi corazón iba a explotar de un momento a otro.
Me intimidaba un poco estar desnuda frente a él, pero tenía unas inmensas ganas de seguir adelante.

-Hermanito...

Puse un sonrisa quiero continuar con esto tanto como tu hermana pero primero quiero que me contestes algo haces esto por que tu lo deseas quiero decir haces esto porque me amas .

Ella asistio con la cabeza y puso una sonrisa en cara en ese cazo la empuje y la me pus encima de ella creo que me toca finalmente me quite las ultimas prendas de ropa que tenia que eran mis bragas y mis pantalon la empuje y me puse encima de ella y le dije en broma vaya despues de todo tal vez si tengamos hijos y el senado no se enojara con nosotros .

-Si, lo que quieras -Contesté impaciente - Pero no me hagas esperar más.

Me apreté contra su cuerpo y le hice perder el control. Comenzó a moverse, al principio iba despacio pero poco a poco incrementó el ritmo. Mis manos acariciaban su cuerpo y él me besaba los labios. Nunca me imaginé que terminaríamos así, pero me sentía mejor que nunca. Quizá después de todo mi hermano era la pareja perfecta para mí.
Intenté moderar mis gemidos para no atraer la atención de los vampiros que montaban guardia en el recibidor, pero Alex me hacía tocar el cielo con los dedos. Su cuerpo y el mío parecían haber nacido para complementarse.

Cuando terminamos, caímos los dos rendidos encima de la cama y yo le abracé. Su respiración y la mía se fueron calmando poco a poco hasta que, cuando por fin pudimos hablar con normalidad, murmuré lo siguiente.

-La próxima vez, hermanito, me pido yo arriba.

Me gire para verla cara a cara vaya jamas espere que esto pasara sabes pero no me arrepiento de nada hermanita con mi mano la jale para besarla a espero que Maximilina no te haya escuchado despues de que dije eso se abrio la puerta bruscamente y entro Maximilian disculpe señor escuche u nos ruidos y pense este se quedo mudo al verme con mi hermana en la cama aaa disculpe mi señor debi llamar antes de entrar salio casi tan repentinamente como entro.

Me puse de pie al instante y comense a vestirme lo mas rapido que pude lo habia olvidado tengo que canselar el vuelo e informar que me quedare aqui ademas creo que considerare borrar ese recuerdo de la memoria de Maximilian esta rojo de verguensa porque Maximilian me habia visto en la cama con mi hermana y no solo eso sino que al pare ser nos habia oido.

Me tapé a todo correr con la sábana, aunque Maximilian ya había salido y el esfuerzo fue en vano.

-No creo que debas borrarle la memoria -Opiné. Estaba mal visto hacer eso con las personas de confianza- Aunque adviertele que sea discreto.

Retiré la sábana y volví a dejar a la vista todos mis encantos. Después de todo, el hombre que estaba conmigo en la habitación no iba a ver nada que no hubiese visto ya.

-¿Sabes? Ahora asciende a dos el número de hombres que me han visto desnuda -Comenté pensativa.

Alexander se dio la vuelta al oírme decirme eso. ¿Había dicho algo inadecuado? Parecía enfadado. Me levanté de la cama y le miré desde una distancia prudente. ¿Qué le ocurría?

El segundo dijiste crei que era el primer hombre rectifico vampiro con el que hacias esto hermanita jamas pense que , crei queera el primero ,no sabes si esto es una broma no me esta agradando en lo mas minimo hermanita ya sabes que soy algo bueno celoso.

Termine de vestireme gire y le dije anda vistete para que me acompañes informare al senado que me quedare aqui contigo hasta que tu seas quien quiera regresar a Inglaterra me dirigi ami maleta la abri y empece a arrogar la ropa por todas partes mientras busca un pequeña cajita cuando por fin la encontre la tome y a meti en el bolsillo izquierdo de mi capa cuando gire la cabeza para ver a mi hermana otra vez esta ya estaba bestida bueno lista .

Me vestí deprisa para poder acompañarle y me acerqué a él.

-Me refería a Maximilian, Alex. - Le dije mirándole con los ojos entrecerrados -Nos acaba de pillar ¿recuerdas? Apuesto a que se habrá quedado anonadado. No todos los días se ve a una princesa como su madre la trajo al mundo.

Estaba echando más leña al fuego, pero me gustaba en cierto modo verle celoso por mí.

-Me pregunto cuantas veces me habrá recordado así -Mi hermano cerró fuertemente los puños y me di cuenta de que la broma había llegado demasiado lejos- Tranquilizate, no lo decía en serio. No vayas a hacer nada o te quedarás sin uno de tus mejores hombres.

Me puse de puntillas y le besé levemente. Después cerré los ojos y puse cara de niña buena.

Eres cruel lo sabias pero aun asi te amo anda vamonos abrei la puerta y Maximilian seguia afuera de la habitacion esperandome al pareser estaba sumamente nervioso lo mire con seriedad y le dije calmate solo recuerda ser discreto quieres reune a Shiro ,Leina , Yadari y takara los veremos abajo tengo que ir al Consulado otra vez al pare ser tengo que dar un par de avisos y notificar algo importante gire y mire a mi hermana con una gran sonrisa en cara.

Maximilian: le garantiso mi discrecion total señor ire por los demas sali de hay tan rapido como pude y fui a reclutar a los demas cazadores oscuros y a informarle a los demas que siguieran vigilando en sus puestos.

Bueno Lily hay que ir abajo pero primero hay que dicimular un poco no despues de decir eso mi pelo se tiño de negro y mi apariencia fisica tomola de un humano mi aura oscura desaparecio por completo no hay que llamar la atencion de los cazadores asi creo deberias tomar apariencia un poco mas humana no cres .

-Pronto seré la reina de los vampiros, Alex. No tengo que disimular mi aspecto.

Aún así retraje los colmillos y sellé el aura vampírica que me delataría delante de cualquier cazador. Caminé delante de él esperando que me siguiera y así lo hizo. Al bajar a la recepción nos esperaban sus guardias, y había una extraña chica de rasgos suaves, casi infantiles que no nos quitaba la vista de encima. La reconocí después de mirarla un par de veces, ya que ella había estado en el grupo que me encontró la primera vez que llegué a la ciudad. Sin apenas mover los labios advertí a mi hermano.

-Hermanito, echa un vistazo a esa chica de allí. ¿La ves? No te dejes engañar por su aspecto, es una cazadora. De todas formas no está haciendo nada malo, así que no vayamos a armar ningún escándalo.

Frente a nosotros se encontraba Maximilian. Al parecer quería informar a mi hermano de que sus órdenes se habían cumplido.

Maximilian estaba enfren de nosotros esperandonos se hacerco y me informo mi señor todo esta listo como ordeno el auto esta afuera esperandolo.

Alexander - Bien hecho dile a kyo y Keishi que vigilen los movimientos de esa chica
Maximilia a y una cosa mas despues de eso puedes retirarte a descansar .

Maximilian: Pero señor crei que usted queria que lo acompañara al consulado

Alexander-No descansa vastante falta te hace por lo que veo cuando regresemos mi hermana y yo quiero que todos descansen han hecho un gran trabajo y se meresen un descanso ademas creo que manden traer la gurdia de mi hermana a Senador Dalan en la carta que le diste ayer si mal no recuerdo Maximilian.

Maximilian: Si mi señor pero esta seguro de lo que dice llebava años sirviendo al amo Alexander y el nunca habia sido gentil o amable con nadie que no fuera su hermana me sorprendio ver que dijiera eso.

Alexander: Si estoy seguro la guardia de mi hermana ya debe estar aqui a estas alturas ellos no pueden cuidar mientras ustedes descansan.

Maximilian : Como guste mi señor me retire de hay a informarle a mis compañeros Kyo y Keishi para informarles lo ocurrido y despues hacerlo me dispondria a ir a mi habitacion.

Alexander: Gire y vi a mis demas guardias bueno vamonos voltie y vi ami hermana y le dije estas lista.

-Sí, lo estoy.

Salimos a la calle y un coche con los cristales tintados nos esperaba fuera. El chófer nos abrió la puerta y pasé seguida de mi hermano. El conductor se introdujo en el asiento delantero y arrancó el coche. Entre los asientos de atrás y los de delante se interponía una ventana por si los pasajeros requerían discutir asuntos de importancia sin que les molestaran.

-Disculpe, ¿Sería tan amable de subir el cristal? Hemos de tratar ciertos asuntos.

El hombre asintió y la ventana se cerró totalmente dándonos intimidad. Me giré hacia mi hermano y me incorporé para sentarme sobre sus rodillas.

-En realidad era una excusa para poder hacer esto -Le confié mientras le daba un beso.

Quería estar todo lo cerca de él que pudiese. Sentía ganas de permanecer a su lado.

Calmate hermanita no nesecitas discrecion para hacerlo meti mi mano en el bolsillo de mi capa y saque una pequeña caja y se la di a ella le dije vamos abrela e esperado vastante tiempo para dartela anda abrela ella la abrio un poco desconserta porlo que podria ser se quedo muda al ver que era un anillo de compromiso.

Lily Attwod quieres casarte conmigo habia esperado una eternidad para poder preguntarle eso espere su respuesta con ancias y en silencio pero sin dejar de irradiar es alegria queme daba que mi hermana por fir se hubiera enamorado de mi .

Miré a mi hermano incrédula y emocionada. El anillo de compromiso que estaba dentro de la caja era precioso.

-Sí, hermanito, claro que quiero. -Le contesté temblorosa. Saqué el anillo y me lo coloqué en el dedo lentamente. Después se lo enseñé - Me sienta bien, ¿no crees?

No pude evitar sonreír. Pasé los brazos alrededor de su cuello y me recosté contra él. Mi corazón latía tan desesperadamente deprisa que me daba verguenza pensar que escucharía las reacciones que provocaba en mi cuerpo. Busqué de nuevo sus labios y los saboreé. Cada vez eran más dulces y despertaban sensaciones más intensas en mi interior.


[Continúa en la Embajada]