Preparativos

Chasqueé los dedos índice y pulgar mientras miraba enfadada el ajedrez situado sobre la colcha de la enorme cama del hotel. Las piezas no encajaban bien, no se movían según la realidad. Había algo erróneo y no lograba averiguar el qué.

-¿Ocurre algo Lillian?

Matthew había atendido a mi llamada, aunque yo en realidad hubiese preferido que viniese Alyssia. Mi mirada seguía fija en las pequeñas piezas blancas y negras.

-Sí. Hazme jaque mate, por favor.

Si mi proposición le había confundido su rostro no reflejó signos de ello. Tomó asiento frente a mí, observó el tablero y movió. Despertó mi curiosidad que hubiese elegido mover a la reina, dejándola expuesta indirectamente a un ataque por mi parte.
Mis dedos acariciaron uno de los alfiles y lo movieron en diagonal, posicionándolo según la estrategia que se iba formando en mi cabeza. Ignoraba sus intentos de iniciar una conversación.

-Lillian…

Seguimos moviendo las piezas durante un buen rato. Se dejó acorralar cerca de mi rey.

-Lillian…

Abrí la trampa de mis alfiles, apoyados por el único caballo que me quedaba. Una de sus torres la echó por tierra. Fruncí los labios y apreté los dientes. Su reina seguía causando estragos entre mis filas. ¿Por qué?

-Lillian…

Levanté la vista del tablero y me dejé perder en sus ojos, intentando en vano llegar hasta sus pensamientos. Sin embargo, en aquella mirada que me había visto crecer se ocultaban muchos secretos. Quería descifrarlos todos.

-¿Qué? –Respondí por fin.

Matthew esbozó media sonrisa, lo cual no era muy habitual en él. Casi pude leer sus labios antes de que lo dijera.

-Jaque mate.

Bajé la mirada precipitadamente. Su mano se preparaba para ejecutar el movimiento que derrocaría a mi rey. De nuevo su maldita reina moviendo los hilos. Estaba cercada, acorralada y sin escapatoria. Se había acabado. Esperé pacientemente que terminase la partida haciendo caer la pieza, sin embargo retiró la envoltura de sus dedos suavemente.
En mi cabeza, las cosas encajaron demasiado brutalmente.

-La reina… es…

-La reina eres tú –Me respondió con calma aquel vampiro-. O pronto lo serás.
-No, te equivocas –Susurré-. Me refiero a esta reina.

Sus manos se entrelazaron en su regazo. Su mirada, ansiosa para lo que era Matthew, me taladraba sin piedad mientras yo intentaba verbalizar mis pensamientos. Mis intentos eran apenas murmullos.

-No hay otra solución…

-¿Y el rey? –Interrumpió Matthew.

Cogí la pieza y la miré detenidamente antes de contestar. Esta vez mis ojos reflejaron una férrea determinación al chocar contra los suyos.

-El rey soy yo. Y ya va siendo de que lo demuestre.

De un manotazo desperdigué todas las fichas del tablero por la cama y por el suelo. El pelo me cubrió la cara.
Aquel vampiro extendió sus brazos y me abarcó por entero. Me alzó como a una pequeña muñeca por encima del tablero y me colocó en sus rodillas.

-Bebe, Lillian.

Me ofreció su cuello mientras apretaba mis muñecas localizando el flujo de sangre que corría por las venas que había en ellas.

-¿Matthew?

-Bebe.

Mis colmillos rozaron su cuello cuando una de sus manos empujó mi cabeza. Mi muñeca estaba peligrosamente cerca de su boca.

-¡Hazlo!

Con un último empellón clavó mis colmillos y los suyos, cada cual en diferentes partes. La sangre que se colaba en mi garganta era muy pesada y caliente, como si intentase tragar oro líquido. Sin embargo mi estómago parecía cantar al notar el alimento. Estaba muy debilitada, pero hasta aquel momento no me había dado cuenta. Mi sangre también era succionada por su labios, delicadamente pero sin pausa. Nos estábamos alimentando mutuamente.
El ansia de su boca y de la mía se calmó paulatinamente.

Alyssia contemplaba la escena apoyada en el marco de la puerta con una sonrisa. El móvil con el que acababa de llamar al taxi aún estaba iluminado en su mano.

-Ya falta menos…




[¡Hola a todos! Me he tomado un pequeño descanso en mi sesión intensiva de estudio porque el mono de escribir era demasiado xD
Quizá el post sea un poco confuso, porque no estoy segura de si os he dicho a todos la verdadera función de Matthew y Alyssia… el caso es que más adelante le veréis algo de sentido a esto. Cuando vea que estáis preparados para atacar las sedes, entonces postearé en el alto mando tal y como habíamos quedado. Me hubiese gustado coincidir con alguno de vosotros pero no ha sido posible, así que… nos vemos! Besos <3]