Giro de los acontecimientos

Aquella mañana me levanté de la cama por mi propio pie, pero con mucho esfuerzo. Sin embargo me esforcé en que no se me notara y pareció surtir efecto.
Alyssia y Matthew me miraban de vez en cuando de reojo. La chica me vistió con ropa de verano porque seguía sudando mucho y parecía tener la fiebre muy alta.

A primera hora nos presentamos en la sala donde nos había atendido anteriormente y Hitomi nos hizo pasar. Dentro se encontraban además Ted, Matt y Edik.

Alyssia me condujo hasta una silla y la retiró disimuladamente del escritorio para que no me sintiera agobiado con tantas auras cerca. Tenía la piel tan pálida que parecía que me hubiesen pintado con un lápiz rojo sobre las mejillas. Y respiraba despacio para que no se notase lo mucho que me estaba esforzando. Como era obvio que ya no podía ejercer mi labor de portavoz, Matthew habló en mi lugar.

-Buenos días, Hitomi -Inclinó ligeramente la cabeza sin dejar de mirarla fijamente-. Te agradecemos que nos hayas permitido pasar la noche en tu mansión. Todo ha sido de nuestro agrado. Sé que aún es pronto para una respuesta, así que nos iremos para que nuestra presencia constante no te presione.

Mi padre me echó un vistazo rápido y acto seguido devolvió la mirada hacia el frente.

-Sin embargo, antes de irnos me gustaría hacerte una pregunta -Hizo una pequeña pausa y Alyssia se agachó hasta quedar a mi altura y me pasó la mano por la frente. Yo se la retiré con delicadeza y volví a prestar atención a la conversación-. Conociendo tu antipatía por los vampiros se me ha venido a la cabeza que quizá poseyeras algún tipo de... Bueno, lo que quiero decir es, ¿tienes en algún lugar de los alrededores agua bendita?


Hitomi y los demás se miraron entre ellos antes de contestar.

Ted me habia contado lo que sucedio con adirael, y los guardianes causantes del problema recibieron su castigo, pero no sabia que tan lastimado estaba, él no se veia para nada bien, y lo que me dejaba confundida es que siendo un vampiro pura sangre no se haya recuperado.

Logicamente, Mattew fue quien hablo esta vez, agredecio la estadia, pero luego me hizo una pregunta que nunca imagine que me diria. "¿Tienes en algun lugar de los alrededores agua bendita?" Nos miramos entre los cuatros y le respondi:

- Si, bueno para ser especifica, no soy yo la que la tiene, son las personas refugiadas, tienen una pequeña iglesia, pero la verdad de aquella edificación, es que para ellos es la segunda pretección que tienen, ya que en ella hay una enorme maquina la cual envia un liquido especial a fuentes, y a recipientes de las diferentes casas esparcidas en el bosque. Ese liquido es "Agua vendita" o "la sagrada" como ellos suelen decirle - me detuve y lo mire extrañada - Lo que no entiendo es que te hizo sospechar que hay agua bendita. - "La fuente" le escuche susurrar a Ted. - Que sucede TeD? - dije mirandolo, pero su mirada mostraba una expresion de preocupación.

- Que descuido de mi parte - dijo Ted conlocando una mano en su cabeza, mostrando mas preocupación - Hitomi, Adirael fue lanzado por los guardias a una de las fuentes del jardin. - obviamente él no me habia dicho esto. Lo siguiente que hizo fue pararse frente a ellos y posarse en una rodilla - Lo siento Adirael, Mattew y Alyssia, debi haber puesto mas atencion a su estado, y por eso les pido disculpas.

- Ted.. - susurre sorprendida por esa racción.

- Oye que haces arrodillado, sabeas.. - esta vez fui yo quien callo a Edik, Ted estaba por volver a hablar y yo queria escuchar lo que diria.

- Hitomi, no creo que sea prudente que viajen con Adirael estando tan en mal estado. - se acerco a mi con la mano en el pecho, mostrando aun mas preocupacion - Yo me encargare de su cuidado - los volteo a ver - Si me lo permiten, solo digan lo necesario, cualquier remedio yo lo conseguire. - nunca espere algo asi, y menos de él, el callado y pensativo Ted. Aunque yo sabia la razon. Todos me miraban esperando a mi respuesta o como reaccionaria, yo cerre los ojos pensando y pensando.

- Entiendo y se que no es prudente que viajen con el niño en ese estado, asi que - abri los ojos y mire a Ted. - pueden quedarse hasta que él este mejor, pero solo hasta que se mejore, luego de eso se marcharan - mire a Mattew - y si lo desean, y como veran, Ted esta a su disposicion. - Ted me miro pero aunque nadie lo notara, note un brillo en sus ojos, en medio de la tipica expresion con la que mantiene.

No quise interrumpir la conversación, pero en cuanto el silencio se apoderó de la sala lo rompí de inmediato.

-No soy un niño. Soy un miembro de la guardia y no ralentizaré el avance. No nos quieres aquí y nos iremos.

Alyssia abrió los ojos sorprendida y desconcertada, y su mano no supo si posarse en mi frente o en mi boca. Al final optó por mirar a Matthew con dolor.

-Perdonadle -Se disculpó el vampiro-. El carácter de Adirael siempre ha sido más tranquilo, pero el agua bendita nos provoca muchísimo dolor sin matarnos.

Matthew se agachó y susurró lo suficientemente lejos de mí como para que no lo oyera, sin embargo hice un esfuerzo y logré escucharlo.

-Hay cosas mucho peores que la muerte. El agua ha entrado en su interior a través de esa herida y le provocará dolor por quién sabe cuanto tiempo. Ted, necesitamos un tipo de planta específica para poder calmarlo y curar la infección.

Matthew se revolvió y alcanzó un papel y un bolígrafo del escritorio. Después miró a Hitomi y le pidió permiso con los ojos. Esta aceptó y la letra de Matthew se plasmó en el folio con el nombre de la planta.

-No hace falta que lo hagas Ted. No eres mi guardaespaldas, soy un vampiro -Comencé a toser y abrí los ojos para mirarle directamente. El sudor me perlaba la frente-. Soy un vampiro, un vampiro...

Alyssia me empujó contra su pecho para que me callase, pero la reacción de los lobos no se hizo esperar.

- Mocoso me molestas con tu quejadera - hablo Matt, con mal humor - No es necesarios que nos heches en cara que eres vampiro, lo sabemos y lo odiamos, pero sea como sea, tienes a ellos que se preocupan por ti, asi que deja tu orgullo estupido, madura y deja que te cuiden. - se fue a parar lejos de nosotros, y yo alcance a escuchar lo que refunfuñaba "dice ser de la guardia pero apenas es un niño no sabe nada, estupido vampirito que no se deja cuidar" puse mi atencion en el papel donde Mattew escribio el nombre de la planta. Luego se la mostre a Ted y le dije:

- Iras con Matt - le ordene.

- Mama, no puede ir solo? ira por una planta no es gran cosa. - me hablo Edik.

- El problema es el lugar donde crece, la Matricaria crece en donde esta situado el nido de heikakus de esta area, nose muy bien el numero, pero suelen haber de 60 a 100, Ted podra ser uno de los mas fuertes riatsukis, pero 100 heikakus es demasiado. - Ted no mostro ni una pisca de duda, estaba decidido, se llevo a Matt, casi a rastras y salieron de la sala, pero antes de irse le dijo a Adirael.

- Tienes razon, no soy tu guardaespalda, es mas no deberia ni hacer esto, pero mientras estes en esta mansion, yo y muchos de sus habitantes, estan a cargo del cuidado de todos. - luego se fue.

- Mama, crees que estara bien que solo vayan ellos dos? - me pregunto Edik.

- Si fuera lo contrario no lo habia hecho. - me dirigi a Mattew - Mientras ellos van, ustedes pueden regresar a su habitacion, dare la orden a uno de los mayordomos que esten pendiente a cualquier pedido suyo. - aunque yo fuera amable, solo lo hacia por Ted, sabia muy bien el por que actuaba asi, y creo que lo necesita, pero aun asi hacia un gran esfuerzo para no mostrar molestia alguna.

Matthew y Alyssia se miraron con preocupación, y a continuación el vampiro se dirigió a Hitomi.

-Iremos con ellos, un número tan grande de Heikakus podría hacerselo pasar mal. Ayudaremos a conseguir ese remedio. Creo que no lo he mencionado antes, pero -Miró una última vez a Alyssia antes de proseguir- Adirael es mi hijo.

Matthew se alejó a paso veloz y le susurró a la joven "Te espero fuera".

-Ve con él, Alyssia. Sé volver solo a la habitación, me portaré bien. Me ha cambiado el carácter pero no el cerebro.

La chica me dedicó una sonrisa tierna y me besó en la frente antes de desaparecer. Me levante de la silla y me limpié el sudor con el brazo antes de dirigirme a Hitomi.

-Siento las molestias que estoy causando, pero mi cuerpo se siente raro y es difícil controlar estos cambios bruscos de humor. Me voy a ir ya.

Tenía las mejillas ardiendo, pero sabría ir hasta la habitación. Lo peor había pasado por la noche, aunque se agravaría si no me traían esa planta. Caminaba despacio hasta la puerta cuando una voz interrumpió mis pasos. Me volví para ver qué quería.

Era cierto, aunque fueran Ted y Matt, son muchos Heikakus como para que salgan en un buen estado, almenos regular, ademas de que si él es su padre, no podria quedarse con los brazos cruzados. Cuando Matthew y Alyssia se fueron a alcanzarlos, Adirael tambien se dirigia a su habitación, pero esta vez fue Edik quien detuvo su paso.

- Espera - camino hacia él - No dejare que te vayas solo a tu habitación, yo estare vigilando que no hagas ninguna travesura, asi que vendras a la mia - lo tomo de la mano y se marcharon. - yo sabia muy bien que no era por esa razon, Edik estaba preocupado por su salud.

- Hitomi, ves lo responsable que se ha vuelto? - me dijo la voz del recien llegado James desde la ventana. - en los proximos dias cumplira los 18 y sabes lo que significa cierto?

- Lose James y no tienes que recordarmelo todo el tiempo, pero, no puedo dejar de verlo como el niño que encontre abandonado y herido en aquel edificio. - le dije sentandome, tenia un leve dolor de cabeza.

- Mañana llegarn Luther y Amy y.. - lo interrumpi.

- Junto a un gran papeleo, James me ire a descansar, porfavor avisame cuando lleguen. - luego de esto tambien me marche.



[CONTINUA EN HABITACIONES RIATSUKI "amigos?"]