Mi Fiel Amigo y Sirviente

Entre al edificio, por suerte casi no habia nadie rondando, y todo el transcurso de subida nadie entreo al ascensor, cuando se abrio divice desde donde estaba a alguien tirado frente a la puerta de mi apartamento. Corri para auxiliarle, pero al acercarme me lleve una gran sorpresa, y mi preocupacion aumento.

- Rafael...Rafael!! que te sucede? - me agache y lo voltee para que quedara boca arriba, pero mas sorpresa me lleve, estaba manchado de sangre y veia como poco a poco sus colmillos desaparecian. - Dios no puede ser, te has convertido en lican..

- Hitomi, queria verte, sentia la necesidad de hacerlo, encontrarte. - se levanto pesadamente para quedar sentado. - Que me pasa Hitomi? y por que estoy en este estado?

No podia responderle, me sentia culpable, yo lo converti en licantropo, Lo unico que hice fue ayudarle a levantar, lo apoye en mi hombro y entramos a mi apartamento. Lo acoste en el sofa y yo me sente en el mueble que estaba al lado.

- Nose como explicarte Rafael, me siento culpable, no, yo soy la culpable de esto. - Comence a contarle todo, aveces tenia que ir por comida, aunque habia poca, para calmarlo. - Y por eso esta asi, Debes odiarme.

- Hitomi, te dije que siempre estaria a tu lado, no niego que me sorprende esto y me deja un poco asustado, pero yo siempre estare contigo en las buenas y en las malas, si antes queria estarlo, ahora lo necesito. - esas palabras me dieron alivio aunque todavia sentia culpabilidad. No me gustaba verlo en ese estado, asi que le dije

- Rafael, ve al baño, este es tu apartamento, puedes quedarte el tiempo que quieras, por ahora, lavate esa sangre, yo buscare ropa para ti. - él entro al baño, y yo sali a pedirle a algun vecino que me prestara ropa, pero comence a sentirme mal, de nuevo sentia sed, y hambre. - No de nuevo - las garras salian y mis colmillos se agrandaban. Me apolle en el marco de la puerta, ya que mi columna me dolia haciendo que me doblara hacia adelante, hasta que senti una mano en mi homobro que me movio, era Rafael.

- Que tienes? Fue raro, pero senti que necesitabas ayuda.

- De nuevo, estoy sedienta. - justo al terminar de hablar, me abrazo y acerco mi rostro a su cuello.

- Si es sangre lo que necesitas, toma la mia, te dije que estaria a tu lado para ayudarte en lo que sea, yo quiero, debo, y necesito hacerlo. Si es necesario toma hasta mi vida, para calmar tu sed. - Yo no queria hacerlo, pero perdia el control, mordi su cuello, y cada minuto que pasaba saciaba mi sed. - Estas satisfecha?

- Si, perdoname. - mis garras ya habian desaparecido, al igual que el dolor en mi columna y los colmillos.

- Te dije que no es problema, por favor debes estar cansada, recuestate y yo me ire a bañar - dijo mientras me abrazaba, me solto y entro al baño, él tenia razon estaba cansada, me recoste en el mueble y pensaba que talvez en el libro que enviare joel-sama podria encontrar algo que vuelva a la normalidad a Rafael.

Abri lentamente los ojos, y lo primero que mi vista encontro, fue a Rafael, viendome, parecia que no hubiera dormido desde que llego.

- No piensas descansar? - le pregunte un poco preocupada, no era bueno estar sin dormir. y mas ahora que era un licantropo.

- No, no te preocupes, ademas, no tengo sueño, ni cansancio, ni nada por el estilo. - me respondio, pero note algo raro en él, estaba como extresado, y sudaba mucho.

- Te sucede algo? - Le pregunte

- No se, no me siento bien desde que anochecio, me duele la columna y mi estomago. - Me acerque hacia él, y le toque la frente, estaba que ardia, tenia mucha fiebre.

- Tienes fiebre, ire a.... - Me calle al ver como cayo al suelo y se retorcia, quice acercarme d nuevo, pero lo que comenzaba a pasar en él, le salian garras, sus colmillos crecian, sus manos se agrandaban, y pelo salia de todas partes.

- Grrrrrrrr... - gruño fuerte, mi preocupacion llego al limite, estaba asustada de lo que fuera a hacer, aunque no parecia que me iria atacar, talvez saldria a atacar a otros.

- Piensa Hitmo que hago que hago? - me preguntaba y pensaba desesperada, hasta que recorde algo, aunque talvez no funcionaria. Los humanos convertidos en vampiros, si beben de la sangre del que los mordio, no llegaran a ser nivel E, y podran llegar a controlar sus instintos.

Corri a la cocina agarre un cuchillo y me hice una herida en la palma de mi mano, sangre salia a borbotones, me acerque a Rafael y coloque mi mano a escasos centimetros del osico que le salia. - Tomala Rafael - Dije con la esperanza de que todavia le quedara conciencia, note que dudaba por un segundo, pero luego comenzo a beberla, cada minuto que pasaba los rasgo de animal salvaje ivan desapareciendo de su cuerpo, hasta llegar a la normalidad, exceptuando los colmillos que aun seguian un poco grandes.

- Hitmo no debiste hacer eso, no soy merezco beber tu sangre, pudiste matarme. - Su ropa estaba rasgada, y se habia sentado en suelo.

- Rafael, yo tambien quiero estar a tu lado para ayudarte en lo que sea, si es necesario tambien te daria toda mi sangre para que volvieras a ser humano, pero por ahora solo puedes controlar tus instinto. - comence a sentirme un poco mal, él habia bebido mucha de mi sangre. perdi el equilibrio, pero antes de caer al suelo Rafa me sostubo.

- Ahora es mi turno de pagarte, salgamos y yo me encargare de buscarte alimento. - no pude negarme, ya que si dejaba que mi estado empeoraba, podria llegar a lastimarlo. El se cambio de ropa, la cual no subia de donde salio, y salimos de mi apartamento.





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