Visita Inesperada

La noticia sobre que vampiros irian a ver a Hitomi se esparcio, por casi todo el bosque rapido, todo por la capacidad auditiva de alguno de los guardianes, o simplemente se comunicaban por radio, en cualquier caso esperaba que Hitomi no lo supiera antes de que llegaramos.
En el camino mucho de los riatsukis miraban con desprecio a los visitantes, y alguno de los humanos que colaboraba en la vigilancia se alejaban con temor.

Llegamos a la mansion, pero me imagine que seriamos recibido por cierco muchacho extrovertido y rebelde.

- Que demonios! TED que te sucede? traer a estos estos.. sabes que a mama..

- Lo se Edik, pero confia, se lo que hago, ademas ellos no son ningunos tontos para atacarla en su propio territorio. - le dije esperando que se fuera a su habitación.

- hmp, pero yo ire contigo - que fuera a su habitacion era algo imposible. Comenzamos a caminar.

- Es aqui - Abri la puerta, entramos, y la escena que encontramos fue ver a Hitomi rodeada de toda la papeleria que yo le habia traido. - Hitomi, tienes visitas.

- Ted, diles que luego, estoy ocupada. - me respondio sin nisiquiera mirar.

- Pero ya esta aqui, en este salon, mirandote mama - esta vez le hablo Edik. Ella levanto la mirada, y su expresion era la que cualquiera esperaria, fue una sorpresa, pero note su ira, y mas si rompia su lapiz con un dedo.

Alyssia y Matthew entraron en la habitación pausadamente. Yo me retrasé, me había quedado mirando al chico que llamaban Edik. No me esperaba que la reina de los lobos hubiera tenido un hijo.
Mi mirada se cruzó con la de Ted e incliné levemente la cabeza antes de pasar y ponerme justo en el centro de los dos vampiros.
La furia empapaba la sala y hacía el ambiente pesado. Mis padres me habían explicado por qué reaccionaría así y lo comprendía. De todas formas yo no era un sangre pura y tampoco debía representar ninguna amenaza para ella.

-Hitomi, mi nombre es Adirael. Creo que a ellos ya les conoces de antes, pero aún así te diré sus nombres: Matthew y Alyssia. Hemos venido a transmitir un mensaje.

Giré la cabeza hacia la puerta, que seguía entreabierta y con Ted y Edik apoyados en el marco. Volví a mirar a la mujer.

-Quizá sea muy pretencioso por mi parte, pero es un mensaje que no puede ser oído por cualquiera. Por favor, si no es demasiada molestia preferiríamos discutir el asunto en privado.

Justo cuando creia que mi dia no iva a ser peor, llegan vampiros a mi mansion. Mi ira crecio hasta llegar al limite, tan solo verlos me fastidiaba, y mas si estaban a corta distancia de mi. Cuando aquel niño comenzo a hablar, lo mire, pero a penas si lograba escuchar algo, solo escuche su nombre y que venian a entregar un mensaje, tambien pidio que solo yo lo escuchara.

- Ni creas que te dejare sola mama, yo... - Edik fue interrumpido por Ted, alsando su mano, se paro normal mirandome, y esperando a lo que diria.

- Edik, Ted, vayan a poner orden, imagino que ya lo habran notado, pero afuera muchos estan alterados. - Ted capto, y se llevo a rastras a Edick. camine rodeando la gran mesa hasta quedar en el centro - Debo confesar que su precencia no es de mi agrado, pero no puedo negarme ante un niño y mas si me habla tan cordialmente. - con la mano le señale para que tomaran asiento en las sillas que quedaban al otro extremo de la mesa y luego tome asiento. - Muy bien cual es ese mensaje? - pregutne con seriedad

Tomamos asiento frente a ella y de nuevo hablé yo. Los otros dos vampiros no tenían que intervenir por el momento.

-Ire directo al grano -Posé con suavidad las manos en mi regazo mientras comenzaba a transmitirle el mensaje-. La princesa vampiro Lillian nos ha enviado aquí con la intención de llegar a un acuerdo entre la parte formada por los vampiros que le siguen a ella y la parte formada por los lobos que te son fieles a ti. Estamos al corriente del suceso ocurrido hace ya muchos años y comprendemos que te resulte difícil pensar en nosotros como posibles aliados, pero hemos venido para eso. Te proponemos, en su nombre, el nacimiento de una nueva alianza.

Conté mentalmente diez para darle tiempo a digerir mis palabras.

-Por supuesto no tienes que darnos una respuesta ahora. Nosotros buscaremos un sitio cercano donde alojarnos y pasado un tiempo volveremos para conocer tu decisión -Interesado en mi discurso, mis ojos se volvieron más vivos-. Ambos tenemos un enemigo común y por separado somos débiles. Podemos darte las pruebas de fidelidad que quieras. Necesitamos unir fuerzas con vosotros desesperadamente, así que antes de echar por tierra nuestra propuesta te ruego que medites sobre ella.

Terminé de hablar y esperé su contestación.
En ese pequeño lapso de tiempo me pregunté dónde pasaríamos la noche.

Escuche con atencion todo lo que me dijo el niño, hasta la última palabra, una alianza? estan al corriente de lo que sucedio hace años? que lo comprenden? En vez de enfadarme, me parecio comico que comence a reirme un poco.

- niño, quiero decir Adirael, dices que comprenden lodificil que fue?, - lo mire directo a los ojos - pienso yo, que la unica forma de que tu puedas comprenderlo, es que veas el cuerpo sin vida de tu seres querido, muertos a mano de un traidor en el que confio, y que te des cuenta que nada de eso hubiera pasado si fuera tomado la decision correcta. - me levante cerre los ojos por un momento intentando tranquilizarme y los abri para mirarlos. - Se pueden quedar por hoy, pero mañana a primera hora, no quiero verlos aqui. Jure que no me aliaria de nuevo con un vampiro y menos con pura sangre. - camine hasta la puerta, donde sabia qeu encontraria a un curioso - Matt podrias guiarlos a sus habitaciones, - el asintio - Necesito estar sola porfavor siganlo, el los guiara. - Camine hasta una de las ventana, en la espera de que aquellos vampiros salieran del salon. No soportaria un segundo mas cerca a ellos.

Un nuevo hombre nos guió hasta las que serían nuestras habitaciones. Alyssia y Matthew apenas hablaron un par de veces, pero no era extraño que no nos dirigieramos mucho la palabra cuando estabamos los tres a solas. Era una sensación muy rara, pero una parte de mí se sentía lleno. A menudo me preguntaba por qué.

-Voy a dar un paseo, papá.

Mi manita asió el pomo de la puerta y lo giró para abrirla. Antes de cerrar, oí una advertencia por parte de ambos. No había de qué preocuparse, sabía cuál era mi deber.

Deshice el camino hasta la sala donde habíamos estado hablando con Hitomi y me quedé contemplando la decoración de la mansión. Las puertas, las alfombras, las paredes, los cuadros... Nadie pensaría que eso era el hogar de unos licántropos. Eché a andar sin saber muy bien hacia donde iba.
Por el camino me encontré con algunas personas, pero nadie pareció alterarse por mi presencia. Mientras tanto mi cabeza registraba tantos datos como podía. Intentaba trazar un mapa mental de aquella enorme mansión. Estaba seguro de que me sería útil.

Matt's POV

Caminaba con el tonto de Edik, aunque casi nunca nos soportabamos, esta vez teniamos una misma idea.

- No se lo que pensaba Ted cuando dejo que vinieran - dijo Edik.

- Nadie sabe lo que piensa el raro, mmm..pueda que Hitomi si. - nos reimos por mi comentario, pero callamos al ver al niño vampiro caminar tan tranquilo. Por un momento note que habia algo familiar en él pero, no le di importancia. Caminamos hasta acercarnos hasta él.

- Niño, deberias andar con cuidado. Podrias ir a partes en la que no deberias estar. - le advirtio Edik, aunque nosotros no lo molestariamos, es solo un niño, pero lo que decia era verdad. Ya la mayoria sabia sobre que habian vampiros en la mansion , y ante cualquier oportunidad, atacarian o harian alguna estupidez.

- Regresa a la habitacion con tus acompañantes. Siendo un vampiro, es peligroso que estes solo. - le dije para luego seguir mi camino, pero.

- Y piensas dejar que se devuelva solo? - me pregunto Edik, nunca espere eso de él.

- Es un vampiro, no? y estaen la guardia escarlata, a lo mejor sabe cuidarse solo, ademas - esta vez mi expresion cambio a una seria - De aqui en adelante, me da igual lo que le pase, cumpli con advertirle, es problema de esos dos por dejarlo salir solo. - y Segui caminando, pero Edik no me seguia, no me importo asi que no me detuve.

Metí las manos en los bolsillos y me quedé mirando a ninguna parte en concreto. En cierto modo era una ventaja mi pequeño tamaño y mi aspecto infantil, ya que nadie sospechaba que si había entrado en la guardia escarlata era por meritos propios. Todo el mundo daba por hecho que yo era inofensivo.

-Gracias por el consejo, pero creo que seguiré caminando un poco más.

Sin embargo, el chico llamado Edik no se había movido del sitio. No sabía si me miraba con odio, o simplemente era curiosidad. Estaba a punto de volver a echar a andar cuando me rugió el estómago de una forma bastante audible.
Estar hambriento en medio de una casa de licántropos no era buena idea. Debía apresurarme y pedirle a papá que me dejase beber un poco de su sangre. Aunque no sabía si moverme ahora era adecuado. Estaba seguro de que Edik también había oído cómo mi estómago se quejaba...

Escuche su estomago gruñir, y no precisamente por alguna amburguesa o carne, al menos no frita. Lo que necesitaba era sangre, odiaba esta situacion, sin poder evitarlo senti temor, un humano junto a un vampiro ambriento, era algo problematico.

- Tienes hambre? - di dos pasos alejandome de él - ve a la habitación, haya tienen tu alimento vampiro. - de alguna forma tenia que desquitarme, era un niño, pero comparado conmigo es viejo. - Y espero que no vuelvas a salir de ahi, por que Matt ni yo estaremos ahi para advertirte. - comence a caminar lejos de él. como dijo, si queria caminar un poco más y con advertencias como la que le dimos, es por que es un vampiro habilidoso. o talvez la segunda razon era porque no queria ser mordido, al menos no por un vampiro.